Hola chic@s, bueno ya tenía ganas de hacer algo así porque a veces tengo ganas de compartir algo y no se muy bien donde, pues bien, aquí estoy, voy a inaugurar el blog hablándoos de un reciente regalo de una gran amiga porque creo que he de compartirlo, se trata de un libro de Sylvia de Béjar, empece a leerlo anoche pero ya he marcado algunas páginas/frases, que son dignas de compartir, el libro se llama "Tu sexo es (aún más) tuyo", como dice en la contraportada es un manual que no puede faltar en la mesita de noche de ninguna mujer y casi... de ningún hombre (opinión de la Federación Española de Sociedades de Sexología).
Os dejo algunas de las frases(párrafos que me han gustado especialmente:
- Las mujeres nunca (ni siquiera hoy) hemos sido educadas para ser dueñas de nuestra sexualidad.
- El sexo es la única actividad en la que el profesional tiene un estatus inferior al del aficionado (Murray Davis)
- Sociedad: Palabra trampa que se usa para echarle las culpas a nadie en concreto y así, si conviene, lavarse las manos con facilidad.
- Seguro que te acuerdas del final de La Bella Durmiente cuando el príncipe despierta a su joven amada con un beso. Que cursi, pero qué romántico, ¿verdad?. A casi todas se nos cae la baba y desearíamos ser Aurora, o Blancanieves o la ingenua prostituta de Pretty Woman. Y no seas boba, lo de Julia Roberts decidiendo abandonar la calle para volver a ser una buena chica (escena previa a aquella en la que su apuesto príncipe se arrepiente de haberle dado calabazas) se debe a la buena influencia del caballero salvador Gere. Si no hubiera sido por él, la chica sigue en la esquina con la bota rota y los preservativos de colores. En fin, que la película y los cuentos de hadas te encanten no debe impedirte captar su negativo mensaje: sin un hombre que nos oriente, nos cuide, en definitiva nos salve, no somos nada.
Pues bien querida, los príncipes azules no existen, y por mucho que lo desees, no verás aparecer a un caballero montado sobre un hermoso corcel del que se bajará para darte un beso y arreglarte la vida para siempre. En el mundo real los hombres sólo son eso: hombres, personas de carne y hueso, como tú y como yo, que bastante tienen con aclararse consigo mismos [...] Solo tú eres la responsable de tu vida y de tu sexo, no puedes esperar que un hombre te entregue la llave de tu placer [...] ni esperar que llegue Papá Noel con tu placer envuelto en un paquetito coronado con un enorme lazo rojo. No, claro que no. Así pues, sólo nos queda (¡te queda!) un camino y ya lo conoces: las mujeres debemos responsabilizarnos de nuestra sexualidad. [...] Es muy fácil meterse con ellos [...] nos resulta más cómodo estancarnos en la pasividad a la espera de que nos salven o ir de víctimas y tener a alguien a quien achacar nuestros males, o sea, ellos, que responsabilizarnos de nuestra sexualidad.
Como veis el libro no tiene desperdicio, y seguro que puede levantar ampollas a más de uno! si os han llamado la atención estos párrafos, os recomiendo que lo leáis, aún os queda mucho más por descubrir!